Una forma sencilla de experimentar el efecto de los ritmos binaurales o binaural beats es hacerlo con las frecuencias que generan las ondas clásicas que emite el cerebro humano en situaciones cotidianas.
Por ejemplo, cuando nos encontramos en estado de alerta hacia el "exterior" o concentrados en cualquier asunto, problema o situación nuestro cerebro emite ondas beta. Es la situación normal cuando estamos despiertos.
Las ondas beta tienen una frecuencia de entre 10 y 40 Herzios (oscilan entre 10 y 40 veces por segundo). Ondas beta de gran amplitud se asocian al miedo, el estrés y la angustia. Ondas beta "normales" evidencian un estado de gran lucidez.
Mediante el estímulo de las ondas beta se puede mejorar la concentración y la respuesta en situaciones que requieren atención. Por ejemplo, cuando vas a realizar un exámen, una entrevista de trabajo, resolver problemas de lógica o manejar cualquier situación que precise un estado de alerta.
Los efectos de los ritmos binaurales que estimulan la producción de ondas beta en el cerebro se consiguen fácilmente.
Una forma sencilla de experimentar el efecto de los ritmos binaurales o binaural beats es hacerlo con las frecuencias que generan las ondas clásicas que emite el cerebro humano en situaciones cotidianas.
ResponderEliminarPor ejemplo, cuando nos encontramos en estado de alerta hacia el "exterior" o concentrados en cualquier asunto, problema o situación nuestro cerebro emite ondas beta. Es la situación normal cuando estamos despiertos.
Las ondas beta tienen una frecuencia de entre 10 y 40 Herzios (oscilan entre 10 y 40 veces por segundo). Ondas beta de gran amplitud se asocian al miedo, el estrés y la angustia. Ondas beta "normales" evidencian un estado de gran lucidez.
Mediante el estímulo de las ondas beta se puede mejorar la concentración y la respuesta en situaciones que requieren atención. Por ejemplo, cuando vas a realizar un exámen, una entrevista de trabajo, resolver problemas de lógica o manejar cualquier situación que precise un estado de alerta.
Los efectos de los ritmos binaurales que estimulan la producción de ondas beta en el cerebro se consiguen fácilmente.